
El fenómeno ha sido atribuido a la presión en el cerebelo, creada por el lazo de la soga utilizada para ahorcar.
Las lesiones en el cerebelo o en la médula espinal están siempre asociadas con el priapismo en pacientes vivos. Al morir por suspensión, ya sea una ejecución o un suicidio, se ha observado que afecta a los genitales de hombres y mujeres.
En las mujeres, el labio vaginal engorda y puede producirse una descarga de sangre de la vagina. En los hombres, ocurre un estado de erección del pene más o menos completo, con descarga de orina,mucosa o fluido prostático en un caso de cada tres. Otras causas de muerte pueden también causar este efecto, por ejemplo heridas por arma de fuego que provoquen lesiones en el cerebro, vasos sanguíneos mayores, o muertes violentas por envenenamiento. Para los investigadores forenses, un priapismo postmorten, es un indicador que la muerte fue rápida y violenta